“En septiembre del 2020, Fundación Piensa publicó un estudio sobre este tema para el cual identifica cuatro ejes que se deben mejorar y en el cual la congestión es sólo un “”síntoma”” de una problemática mucho más estructural.
El jueves recién pasado se nombró a Enrique Vinet (FREVS) como seremi de Transporte y Telecomunicaciones para la Región de Valparaíso. Asume en un momento en el que el regreso a la presencialidad de estudiantes y trabajadores ha puesto en jaque al sistema público, evidenciando -por un parte- la falta de maquinarias por la ausencia de choferes, un retraso en las frecuencias, y la necesidad de contar con nuevos recorrido; y por otra, la existencia de altos niveles de congestión en el Gran Valparaíso durante los horarios punta.
Previo a su arribo, el gobernador regional Rodrigo Mundaca encabezó una serie de reuniones para intentar resolver la problemática, sobre todo la más urgente de los “”tacos””, por los cuales aquellos trasladados que usualmente demoraban 40 minutos pueden llegar a las 2 horas. Incluso, en la visita que realizó el ministro de Transportes y Telecomunicaciones Juan Carlos Muñoz a la región, no dudó en proponerle que hubiese restricción vehicular para así intentar desincentivar el uso de los autos privados.
El jueves recién pasado se nombró a Enrique Vinet (FREVS) como seremi de Transporte y Telecomunicaciones para la Región de Valparaíso. Asume en un momento en el que el regreso a la presencialidad de estudiantes y trabajadores ha puesto en jaque al sistema público, evidenciando -por un parte- la falta de maquinarias por la ausencia de choferes, un retraso en las frecuencias, y la necesidad de contar con nuevos recorrido; y por otra, la existencia de altos niveles de congestión en el Gran Valparaíso durante los horarios punta.
Previo a su arribo, el gobernador regional Rodrigo Mundaca encabezó una serie de reuniones para intentar resolver la problemática, sobre todo la más urgente de los “”tacos””, por los cuales aquellos trasladados que usualmente demoraban 40 minutos pueden llegar a las 2 horas. Incluso, en la visita que realizó el ministro de Transportes y Telecomunicaciones Juan Carlos Muñoz a la región, no dudó en proponerle que hubiese restricción vehicular para así intentar desincentivar el uso de los autos privados.
El Diagnóstico
El investigador identifica cuatro problemas que afectan la prestación óptima del servicio: la citada congestión, la seguridad vial, la desintegración del transporte público y la infraestructura vial. En cuanto al primer punto, la Fundación Piensa ya daba cuenta en su Encuesta de Calidad de Vida de 2018 este problema: un 61% de los habitantes de Concón aseguraba que los “”tacos”” afectan su vida cotidiana o calidad de vida. En Quilpué, esa cifra era de 54 por ciento, seguido por Viña del Mar (45%), Villa Alemana (38%) y Valparaíso (36%).
¿Por qué pasa esto? Una de las variables es el aumento del parque automotriz. Según los datos mencionados por García en el estudio, “”la tasa de vehículos por hogar ha crecido de un 0.4 a un 0.55 entre 1998 y 2014″”, según datos de la Encuesta de Origen Destino aplicada el 2014 por el Programa de Vialidad y Transporte Urbano del Ministerio de Transporte y Telecomunicaciones, que ha sido la última actualizada, por lo que según las proyecciones la cifra debería ser más alta para 2019. A su vez, “la pandemia y también los retiros de las AFP incentivaron la compra de nuevos vehículos”, detalla García a este Diario. “”De hecho, la Asociación Automotriz de Chile (ANAC) estima que el 2021 la venta de automóviles creció un 60% en relación con el año anterior. La verdad es que esto no es particularmente nuevo, puesto que las cifras ya venían al alza””, agrega.
La otra variable tendría como base la inauguración de la autopista Troncal Sur bajó los tiempos de viaje para el traslado de los habitantes de la provincia de Marga Marga (Olmué, Limache, Villa Alemana y Quilpué) hacia Viña del Mar y Valparaíso y viceversa, lo que podría haber redundado en mayor uso de autos privados, ya que la locomoción colectiva no pasa por esta ruta.
En cuanto al costo / oportunidad que genera la congestión, según datos entregados por la Fundación Piensa, diariamente es de $223.771.097, mientras que anualmente esa cifra llega a los US$131.468.943.
El segundo punto que identifica García es la seguridad vial, el cual dice relación con los accidentes que se producen. Desde los choques por alcance hasta los fatales, y que significa movilizar recursos humanos de Carabineros, Bomberos, el Samu y otras entidades involucradas. Según datos de la Corporación Nacional del Tránsito, en la región de Valparaíso los accidentes de tránsito han aumentado en los últimos 10 años, y entre los puntos críticos, citados en el estudio, se encuentran -entre otras- las avenidas España y Errázuriz en Valparaíso; Avda. Libertad y Viana (Viña del Mar); Avda. Los Carrera en Quilpué, y la Avda. Valparaíso en Villa Alemana.
Fundación Piensa entrega otro dato interesante al respecto el costo por accidentes para el periodo 2009 – 2019 ha sido de UF 2.832.939, que equivale casi a la totalidad del presupuesto regional del año 2019.
Para una persona que vive en alguno de los cerros de Valparaíso, dirigirse a Viña del Mar puede ser un verdadero dolor de cabeza, a pesar de ser comunas vecinas. Primero tiene que tomar alguna locomoción para bajar al plan (micro, colectivo y/o ascensor, si es que están funcionando), luego tomar otra para dirigirse a la Ciudad Jardín (micro, colectivo, metro) y al llegar a ella, tal vez, deba tomar otra para ir al lugar que necesita. Y, por supuesto, debe pagar por cada uno de esos usos. Ello es porque los Sistemas de Transportes Públicos (STP) “no funcionan de manera integrada y cada uno de los equipos marchan de manera independiente, a veces incluso compitiendo entre ellos, imperando una lógica no colaborativa entre estos actores”, afirma Gonzalo García en su estudio.
“No existe -añade el investigador de Piensa- una política de tarifa integrada al momento de usar distintas combinaciones modales. Tampoco existe una lógica de asignación de recorridos que permita optimizar los viajes de los usuarios, integrando los distintos medios de transportes que operan en el Gran Valparaíso. Menos existe una institucionalidad coordinadora del sistema en general”, provocando que el sistema “funcione de manera deficiente y desarticulada”.
Por último, otro tema relevante para entender lo que sucede con el sistema de transporte público tiene que ver con la falta de inversión en infraestructura vial, desde principios de la década 2000. En aquella época se realizó el soterramiento del metro en Viña del Mar, la construcción del camino La Pólvora y el Troncal Sur, por lo que si sólo se ataca la congestión, la problemática mayor continuará, por eso hay que trabajar en los otros puntos débiles.