Piensa: Plan no incluye a la industria inmobiliaria y no tiene hilo conductor

Piensa: Plan no incluye a la industria inmobiliaria y no tiene hilo conductor

En entrevista con El Mercurio de Valparaíso ingeniero, urbanista e investigador de la Fundación Piensa, Ignacio Aravena, analiza el Plan de Reconstrucción del Gobierno para las zonas afectadas por el megaincendio del 2 y 3 de febrero.

“Si bien considera que lo elaborado “es bien intencionado y tiene una amplia cobertura” cuestiona, entre los puntos más relevantes, los plazos, la falta de capacidad para distinguir “entre lo urgente versus lo importante” y la no incorporación “de la industria inmobiliaria en ninguna dimensión”. Todo ello lo lleva a concluir que lo propuesta “evidencia el déficit de gestión de las autoridades, puesto que no se dimensionan aspectos prácticos”.

 

¿Qué le parece este Plan de reconstrucción?

– El plan busca ser integral y abordar diversas dimensiones, como soluciones habitacionales, infraestructura urbana, condiciones de adaptabilidad y recuperación de la economía. Sin embargo, todavía no veo un plan estratégico que enlace las 166 medidas indicadas en el documento.

A dos meses de la tragedia, yo hubiera esperado una concatenación más fuerte entre el catastro dentro del plan, que hace un buen trabajo en distinguir los impactos heterogéneos a lo largo de la ciudad, y las medidas que le siguen; más aún, un gran número de ellas son genéricas y no responden al incendio en sí, como la número 124, que habla de mecánica de suelos y levantamientos topográficos, lo cual, simple-mente, es parte del estándar técnico de un proyecto de enverga-dura. Como se dice en buen chileno, “el que mucho abarca poco aprieta”, y este parece ser el caso, pues al tener tantas actividades en el plan, es difícil crear un hilo conductor.

 

El plan establece medidas como la autoconstrucción asistida, lo que implica un subsidio para materiales y mano de obra, además de la supervisión de un especialista del Minvu. ¿Es esta una alternativa idónea para este proceso?

– Sí, es una alternativa válida, especialmente si se trata de una vivienda unifamiliar: También cabe destacar que en barrios con-solidados, muchas familias son dueñas de su predio, por lo que entre esperar a la ayuda del Esta-do, donde es casi imposible que un subsidio cubra la reposición completa de una vivienda, o iniciar un proceso de autoconstrucción, la opción de tener asistencia es viable. No obstante, cabe preguntarse sobre las capacidades instaladas del Minvu para poder asistir a miles de familias y que estas estén dispuestas a esperarlas antes de construir. Ojalá la cobertura sea lo más amplia posible.

 

PLAZOS

El Gobierno espera que la reconstrucción de más de 4 mil viviendas finalice en 2027 y el plan concluya en su totalidad el 2029. ¿Son plazos prudentes?

– El plan dispone de la mayor cantidad de instrumentos de política habitacional. Sin embargo, no incorpora a la industria inmobiliaria en ninguna dimensión ni tampoco tiene una hoja de ruta donde se establezcan las 10 o 20 medidas que son imprescindibles para cumplir con los plazos. Creo que la reconstrucción tomará más tiempo si consideramos la participación ciudadana en distintas medidas que podrían parecer repetitivas, como entre la planificación de los condominios y la planificación urbana. A eso hay que sumar que hay 17 barrios afectados de manera heterogénea. ¿Por dónde y en qué medidas se iniciará a trabajar? Eso es algo fundamental que el plan debería responder: Por otro lado, tenemos que pensar que una construcción toma entre 8 y 12 meses si se trata de una casa y cerca de 18 cuando es un proyecto; dado que no todo comenzará al mismo tiempo, es difícil pensar que se logrará la meta, más aún si la industria de la construcción en la región está contraída y los actores relevantes, como Beltec, se han declarado en quiebra.

 

BUROCRACIA

Ignacio Aravena también enfatiza que “en un contexto donde los permisos sectoriales y la burocracia estatal es un desincentivo a la industria, sería bueno tratar de simplificar una serie de procesos y trámites, tanto a nivel de licitaciones, contrataciones, obtención de permisos, títulos de dominio y evaluaciones ambientales”.

De no considerarse estas dimensiones, asegura que “estaremos entrampados en procesos iniciales antes de realmente pasar a las soluciones que requerimos, tal y como lo destacó el equipo de colaboradores del expresidente Piñera en el documento que presentaron hace más de un mes”.

 


Noticia publicada en El Mercurio de Valparaíso