Que las regiones no sean un botín electoral
Señor Director:
Al igual que en la elección anterior, tras definirse los vencedores al cargo de Gobernador Regional, los focos vuelven rápidamente a volcarse sobre la carrera presidencial.
Además de buscar interpretaciones apresuradas que puedan respaldar a uno u otro candidato a La Moneda -como si las elecciones territoriales no pudieran ser reflejo de la realidad local- es lamentable constatar que, una vez más, las regiones pasan fugazmente por el radar y luego vuelven a ser relegadas al segundo (o incluso tercer) plano. Basta ver cómo las demandas regionales, como por ejemplo la mejora de la conectividad o la modernización de los planes reguladores, apenas logran espacio en la agenda política y en los noticieros nacionales.
Esperamos que en la próxima campaña presidencial veamos un genuino interés por la descentralización y no olvidarnos de nuestras regiones durante otros cuatro años, solo para recordarlas cuando vuelvan a ser útiles como botín electoral.
Carta publicada en La Tercera