SLEP de Valparaíso: ¿Recursos insuficientes o gestión ineficiente?

SLEP de Valparaíso: ¿Recursos insuficientes o gestión ineficiente?

Hace algunos días, dos estudiantes de II° Medio cayeron de una las graderías ya podridas del Liceo 1 de Valparaíso, siendo posteriormente trasladadas al Hospital Van Buren con lesiones de gravedad. Según los apoderados y estudiantes del establecimiento, la comunidad escolar lleva varios años insistiendo al Servicio Local de Educación Pública (SLEP) de Valparaíso para reparar esta y otras instalaciones, como los techos y los agujeros en las salas de clases.

Este lamentable episodio podría no ser aislado. Varios establecimientos de Valparaíso y Juan Fernández (que también pertenece a este SLEP) han denunciado el mal estado de su equipamiento, señalando que, en ocasiones, las costosas reparaciones ya realizadas no han sido eficientes a la hora de solucionar problemáticas como, por ejemplo, el paso de la lluvia al interior de las aulas. Lo anterior ha impedido el correcto desarrollo de las clases o incluso llevado a su suspensión, exacerbando la fuerte crisis de ausentismo escolar que vive el país y la región.

La realidad es aún más preocupante si consideramos que solo en mayo de este año se destinaron más de 1.000 millones al SLEP para la reparación de las techumbres y, en junio, se entregaron otros 1.500 millones desde el Ministerio de Educación para solucionar otros problemas de infraestructura. En total, estas asignaciones suman más de 2.500 millones adicionales al presupuesto de mantenimiento y proyectos de conservación.

Lamentablemente, este aumento significativo del presupuesto no se ha reflejado en mejores instalaciones en los establecimientos de la región debido a la deficiente coordinación de los funcionarios locales. Sin ir más lejos, a principios de septiembre recién se encontraban en ejecución 147 millones en 9 de los 36 establecimientos destinados para estos fondos de emergencia, y que fueron solicitados por el mismo SLEP. Entonces, ¿estamos realmente ante un problema de presupuesto o, más bien, ante una pésima capacidad de gestión?

Desde el Colegio Municipal de Profesores han manifestado su preocupación por la transparencia de las licitaciones y uso de los fondos, mientras que en el SLEP -que anteriormente se escudaba en la falta de recursos-  parecen no haber captado aún la gravedad y urgencia del asunto. Incluso hoy, con los fondos disponibles, no han logrado reparar la infraestructura prometida ni alertar a las comunidades escolares de los posibles riesgos asociados a estructuras desgastadas. La lenta ejecución y exceso de reuniones que no llevan a nada concreto retratan a un SLEP “dormido”, cuya ineficiencia se ha traducido en nuevas suspensiones de clases y graves accidentes que esperamos no se vuelvan a repetir. ¿Cuántas tragedias más tienen que ocurrir para que las autoridades demuestren que tienen la capacidad de cumplir con su tarea?

 


Columna publicada en El Mercurio de Valparaíso